Conociendo a los vecinos

Esto es la imagen que vemos desde el convento, es el cerro que está justo detrás.
Nos han contado que el terrorismo en lima tenía atemorizados a los peruanos y decidideron huir a las provincias, pero viendo que no encontraban un lugar se asentaron en los cerros, a pesar de las condiciones arenosas del terreno y la poca estabilidad de sus piedras.

Y comenzaron a construir sus casas. Al principio sólo eran 4 palos y siempre alguno de la familia se quedaba aquí para que nadie les robase el terreno. Luego se construyeron una casita donde cocinaban con leña o algunos con un balón (bombona) de gas. Y poco a poco se fueron formando grandes aglomeraciones. Es difícil encontrar un trocito de cerro sin construcción.

Una parte de este cerro tiene alcantarillado gracias a un proyecto de karit. A otra parte más alta les llegó el agua justo hace 2 días después de 15 años!!! Y aún quedan 100 familias sin agua. Tienen grandes bidones en las puertas que deben andar rellenando de un camión que viene cada día y les cobra por eso.
Entre todos los vecinos construyeron esta escalera que véis en la foto para poder acceder a las "casas" más altas. Algunos se lastimaron al construirla pero se sienten muy orgullosos de lo que hicieron con sus manos y su trabajo compartido.
La señora Maribel ha dejado el "salón" de su casa para hacer un pequeño comedor social y ahí andan dando de comer a los hijitos de los vecinos que trabajan todo el día. Unos y otros se apoyan Ella dice que hay semanas que no pueden dar platos nutritivos (un pollo en una olla para 50 niños) y otras en las que no pueden ni siquiera dar nada por falta de "plata". Pero ahí siguen...
Y aún les queda mucho por hacer, son todo un ejemplo de superación.
Ya hemos subido varias veces a este cerro vecino. Nuestro guía allí es el hijo de Maribel. Se llama Cristian, y a pesar de su asma baja y sube el cerro con una facilidad impresionante. Y no sólo para ir al cole, también para recogernos en casa y llevarnos cerro arriba para indicarnos y protegernos.Una noche cuando bajábamos le dijimos que no hacía falta que nos acompañara de nuevo y empezamos a bajar sin él. Cuando de pronto dudamos por dónde tirar miramos atrás y vimos que nos acompañaba en la sombra para que no nos perdiéramos... ya véis que no hay que preocuparse, siempre hay alguien que te muestra el camino...
Pues nada esto es sólo para que conozcáis un poco más a nuestros vecinos, y que aunque sólo lo serán de forma temporal, como decía Marcos, hoy y ahora tienen nombre y apellidos.
P.D. Hoy han hecho una pequeña fiesta en el barrio para celebrar el 80 cumpleaños de la hermana Carmen. Todo el mundo le ha regalado comida, canciones, bailes y mil agradecimientos. La quieren de veras... Hemos pasado un rato muy bueno. Y ella estaba feliz.